Autora: Kristen Ciccarelli
Traducción: Carmen Torres y Laura Naranjo
Editorial: Nocturna
Fecha de publicación: 2018
Número de páginas: 472
Género: Fantasía
Trilogía: Iskari I
Hace años se susurraban historias venenosas de magia y oscuridad, ahora prohibidas porque su eco atrae a los dragones. Asha lo sabe mejor que nadie: cazarlos es su deporte favorito. Solo uno la ha derrotado, el responsable de desfigurar su rostro con una horrible quemadura. Cuando el rey de Firgaard le ofrece un trato a cambio de traerle la cabeza de ese mismo dragón, ella no duda en aceptar. Y si el juego de la corte es hilar una telaraña de alianzas traicioneras, el suyo ahora consiste en ignorar los secretos que le oculta su familia, las mentiras del comandante de la guardia y los ardides de su esclavo para concentrarse en la caza. Después de todo, Asha vive para matar... y sus sueños se han envenenado de magia y oscuridad.
Hoy os traigo la reseña de Iskari, un título que tenía en mi lista de lecturas pendientes y obligatorias para este año. Los dragones son mis criaturas mitológicas favoritas y siempre que me cruzo con un libro que trata sobre dragones, este debe acabar en mis manos. Cuando vi que Nocturna iba a publicar esta trilogía me puse muy contenta y las expectativas subieron mucho, pero tras haber leído el libro tengo sentimientos encontrados. Seguid leyendo si queréis descubrir por qué.
Cuenta la leyenda que el Namsara es el elegido por el Viejo para conducir a su pueblo al bien. El héroe, el guerrero bendecido por el dios. Pero ahí donde hay un Namsara, también habrá un Iskari, la persona maldita, la que condenará a sí misma y a todos los que la rodean al sufrimiento y la destrucción. A Asha la apodaron Iskari desde que era un niña, así es como la conocen todos en el reino de su padre, y es que allá donde Asha se encuentra, también lo hace la muerte. Por eso ella es la mejor cazadora de dragones que ha existido nunca. El único objetivo de su mísera existencia es dar muerte a las criaturas culpables de su maldición. No puede ni imaginar que sólo los dragones podrán salvarla de su trágico destino.
La historia está narrada en tercera persona y normalmente desde el punto de vista de Asha, una protagonista fuerte, perseverante e inteligente. Es un personaje cuyo desarrollo vemos evolucionar progresivamente desde el primer capítulo. Creció con la certeza de que está maldita y en su interior solo hay lugar para el odio y la venganza contra los dragones que le arrebataron su niñez, el cariño de sus seres queridos y todo lo que la rodea. Pero ese odio se va mitigando poco a poco, cuando conoce al esclavo de su prometido, Torwin, un joven que vuelve su mundo patas arriba; cuando el Viejo empieza a aparecerse en sus dueños y encomendarle misiones sin sentido; y cuando en su interior empieza a cuestionarse si no ha vivido engañada todos esos años.
El resto de personajes, como Torwin, Safire o Dax, cobran importancia en la segunda mitad del libro y van desarrollando distintos entramados secundarios que enriquecen la historia principal.
El elemento predominante en la historia es la acción y la batalla, pero también habrá lugar para el romance. He disfrutado mucho del entramado político de los reinos y las rencillas entre las distintas tribus y etnias existentes. En general tienen un entramado bien desarrollado y un mundo rico e interesante.
Algo que no me ha terminado de encajar es el asunto de las "historias" (contar historias está prohibido, es malo) y cómo estas historias están relacionadas con la teología propia del libro (el Viejo es el dios de este mundo y, supuestamente, al contar historias -de cualquier tipo- se está predicando con su religión) además de que estas historias al ser contadas atraen poderosamente a los dragones a aquel que las cuente. Entiendo que los dragones son seres mitológicos de gran inteligencia y muy curiosos, pero es un elemento que no he digerido bien mientras leía, sentía que cojeaba y no estaba bien sustentado.
Otra cosa que me ha dejado un poco fría es lo poco que se habla de los dragones en el libro, a pesar del gran papel que tienen. Todo el protagonismo se lo lleva Asha y es una pena, porque la autora plantea unas bases muy buenas que podrían desarrollar mucho más a estas magníficas criaturas.
El final es interesante, pero es algo predecible y, junto con lo que os acabo de comentar sobre las "historias" y los dragones, me supo a poco, se quedó algo soso. Dejando eso a un lado, es un libro que me ha resultado entretenido, aunque no ha podido conquistarme. Si la editorial decide apostar por su segunda y tercera parte me pensaré si quiero continuar leyéndolos.
Cuenta la leyenda que el Namsara es el elegido por el Viejo para conducir a su pueblo al bien. El héroe, el guerrero bendecido por el dios. Pero ahí donde hay un Namsara, también habrá un Iskari, la persona maldita, la que condenará a sí misma y a todos los que la rodean al sufrimiento y la destrucción. A Asha la apodaron Iskari desde que era un niña, así es como la conocen todos en el reino de su padre, y es que allá donde Asha se encuentra, también lo hace la muerte. Por eso ella es la mejor cazadora de dragones que ha existido nunca. El único objetivo de su mísera existencia es dar muerte a las criaturas culpables de su maldición. No puede ni imaginar que sólo los dragones podrán salvarla de su trágico destino.
La historia está narrada en tercera persona y normalmente desde el punto de vista de Asha, una protagonista fuerte, perseverante e inteligente. Es un personaje cuyo desarrollo vemos evolucionar progresivamente desde el primer capítulo. Creció con la certeza de que está maldita y en su interior solo hay lugar para el odio y la venganza contra los dragones que le arrebataron su niñez, el cariño de sus seres queridos y todo lo que la rodea. Pero ese odio se va mitigando poco a poco, cuando conoce al esclavo de su prometido, Torwin, un joven que vuelve su mundo patas arriba; cuando el Viejo empieza a aparecerse en sus dueños y encomendarle misiones sin sentido; y cuando en su interior empieza a cuestionarse si no ha vivido engañada todos esos años.
El resto de personajes, como Torwin, Safire o Dax, cobran importancia en la segunda mitad del libro y van desarrollando distintos entramados secundarios que enriquecen la historia principal.
El elemento predominante en la historia es la acción y la batalla, pero también habrá lugar para el romance. He disfrutado mucho del entramado político de los reinos y las rencillas entre las distintas tribus y etnias existentes. En general tienen un entramado bien desarrollado y un mundo rico e interesante.
Algo que no me ha terminado de encajar es el asunto de las "historias" (contar historias está prohibido, es malo) y cómo estas historias están relacionadas con la teología propia del libro (el Viejo es el dios de este mundo y, supuestamente, al contar historias -de cualquier tipo- se está predicando con su religión) además de que estas historias al ser contadas atraen poderosamente a los dragones a aquel que las cuente. Entiendo que los dragones son seres mitológicos de gran inteligencia y muy curiosos, pero es un elemento que no he digerido bien mientras leía, sentía que cojeaba y no estaba bien sustentado.
Otra cosa que me ha dejado un poco fría es lo poco que se habla de los dragones en el libro, a pesar del gran papel que tienen. Todo el protagonismo se lo lleva Asha y es una pena, porque la autora plantea unas bases muy buenas que podrían desarrollar mucho más a estas magníficas criaturas.
El final es interesante, pero es algo predecible y, junto con lo que os acabo de comentar sobre las "historias" y los dragones, me supo a poco, se quedó algo soso. Dejando eso a un lado, es un libro que me ha resultado entretenido, aunque no ha podido conquistarme. Si la editorial decide apostar por su segunda y tercera parte me pensaré si quiero continuar leyéndolos.
¿Lo habéis leído?
¿Me recomendáis algún libro de dragones que os haya encantado?
¡Felices lecturas!
¡Holaaa!
ResponderEliminarMe encanta la fantasía y los dragones también, así que este libro tiene bastantes papeletas para gustarme :D
Me llama la atención el mundo y la protagonista, con todo el tema de las historias y de la teología, aunque es una pena que el tema de los dragones no esté tan bien desarrollado como podría :/
¡muchos besos!