Qué decir... Para empezar tengo un dolor de oídos tremendo. Para continuar... algodón de azúcar.
Voy arrastrando los días de una forma muy poco saludable. Comienzo a pensar que el verano llegará con su regreso, pese a que no están siendo malos días. Pero las lágrimas están por brotar.
Nunca presumí de ser fuerte, "al principio de los tiempos" no lo era. Ahora sí lo soy, algo, no tanto. Y giro la cara cuando veo que alguna pareja se hace algún cariño. Me sale de forma involuntaria, tal vez porque al ver la escena un par de veces ha salido la espinita de la envidia o simplemente he evocado recuerdos. Y duele (aunque no tanto como mi oído).
Las películas no están tan mal, ni las series. Estoy volviendo a escribir y dibujar. Paso todo el tiempo posible con mi familia y amigos. También paso tiempo en el Jardín. No está tan mal...
Pero tus labios son mejor... Y esperar cansa.